Formando parte del extenso quehacer artístico contemporáneo, encontramos la cerámica como una de las manifestaciones con una gran tradición en la Isla y que ha aportado mucho a nuestro acervo cultural.

En este hacer se inserta la XXVII edición del Encuentro Internacional Terracota 2019, inaugurada en el taller cultural “Luis Díaz Oduardo”. Espacio que, con una gran tradición en la promoción de las artes visuales, acoge este evento hasta el próximo 25 de mayo.

Con la asistencia de múltiples artistas del país y participantes foráneos con importantes reconocimientos como el Premio Nacional de Cerámica Argentino 2016, Eduardo Jorge Andaluz Faraone; esta edición continúa apostando por la promoción de jóvenes artistas y sus nuevas formas de producción del arte.

Diversidad y tradición se abrazan en un encuentro que se abre ante plurales procederes en materia de cerámica. El barro, protagonista y medio; idea y coherencia artística suman a este loable empeño; en tanto la técnica y el modelado, advierten un hacer mágico donde se nutre experiencia y quehacer.

Una ocasión para que los artistas muestren lo que pueden hacer en materia de arte y se lleve a cabo un nutritivo intercambio cultural, donde el dominio de la técnica o la madurez del oficio son valores agregados; perspectivas e ideas prevalecen en cada obra y son, en definitiva, las que harán a la cerámica retomar o escalar nuevos peldaños en las artes plásticas.

Debates teóricos, visitas a talleres de creadores y galerías de la ciudad de Santiago, son algunas de las actividades de este encuentro donde cada creador, sin temáticas específicas, es capaz de crear las piezas que su ideario le permita. Obras que serán entregadas a personalidades, instituciones y escuelas de arte de la provincia, luego de terminado en evento.

Múltiples son las razones por las que se considera importante este encuentro anual y el trabajo con el barro: el intercambio de información que a través del estudio de tipologías y técnicas que utilizan los artistas se muestran; así como, por las posibilidades de trabajo experimental, la búsqueda artística y expresiva; la durabilidad y la diversidad del material.

Un evento que propicia el desarrollo y la expansión de la cerámica artística, la decoración de espacios constructivos con murales cerámicos y ofrece la oportunidad de unir la impronta artística a la obra arquitectónica. Esperando que cada artista ofrezca, desde su quehacer, una mirada crítica del ser humano y su contexto social, la belleza de su entorno; plasme su realidad o el mundo onírico, motivo de ensoñaciones, sesiona este encuentro Internacional.