Desde muy joven el destacado trompetista Yasek Manzano se abrió paso en el mundo de la música por su incomparable talento y virtuosismo. Su forma y estilo están marcados por un profundo  apego a las raíces de la música cubana.

En una entrevista realizada por el Noticiero Cultural,  en colaboración con el Periódico Cubarte, Manzano comenta sus impresiones a propósito de su participación en la 36 edición del Festival Jazz Plaza que transcurre por estos días en su versión online con la actuación de reconocidas figuras nacionales y extranjeras.

Concierto en el museo de Bellas Artes

Está prevista la transmisión online, en las plataformas del Ministerio de Cultura, de un concierto que hice en el teatro del Museo de Bellas Artes, un proyecto que ya venía preparando hace algún tiempo: un cuarteto de cuerdas, con mi cuartero de jazz. Espero que lo disfruten porque es una cosa novedosa en mi trabajo y bastante atípica, podrán encontrar composiciones mías y algunos temas antológicos de la música cubana.

Transmisión online del Festival Jazz Plaza

Creo que es importante adaptarse a los nuevos tiempos, a pesar de que yo abogo por los conciertos en vivo, porque siempre la comunicación con el artista, con el jazzista, sea en un escenario donde existan ciertas condiciones acústicas, una preparación artística, todo un espectáculo para el público, eso no tiene comparación porque es la vibra, es la energía del músico, eso caracteriza al jazz y a la música, en general.

Sin embargo, la alternativa online, ha servido para mantener  la promoción de nuestra música, de nuestro  jazz cubano y estar visible para el mundo entero, por supuesto, nos permite también un mayor alcance que si estamos en una sala de concierto. Muchos más millones de personas pueden ver lo que estamos haciendo en el Jazz Plaza.

Para Cuba, es súper importante adaptarse a estas nuevas reglas, aprovechar al máximo para promover todo lo que vale y brilla de nuestra cultura. Me parece que es una alternativa que debemos defender y estoy súper agradecido de que me hayan incluido en esta plataforma, incluso en las entrevistas, en todo lo que está alrededor del evento que es muy importante para mi carrera y para la de  todos los jazzistas cubanos.

Conversatorio sobre Scat  (improvisación vocal)

Tengo previsto participar en un conversatorio sobre el Scat. Me sorprendió que me llamaran para esto, pero bueno, yo soy uno de esos hijos del maestro Bobby Carcassés, a quien le estoy eternamente agradecido, porque gracias a él pude dar los primeros pasos en el jazz,  si no lo hubiera conocido, no hubiera sido jazzista, hubiera sido quizás músico clásico porque me gusta mucho esta música y también la hago.

Fue interesante que me llamaran para hacer esto porque no me considero un cantante, me considero un seguidor de la tradición de Bobby, a la hora de crear ese espectáculo con el público, es algo que he hecho en Cuba y fuera del país, y me ha ido bien porque aprendí con él esa magia de enganchar al público, ese dinamismo, esa sinceridad en el momento de cantar, incluso, cuando no eres cantante y no tienes voz para eso, pero defiendo esa cuestión creativa, auténtica, original que surge durante  la improvisación.

Si tienes tamaño de bola de, cómo se hace el Scat, y tienes la osadía de hacerlo, te lanzas y lo haces y eso crea una comunicación muy directa. Digamos que la voz,  es el elemento más personal que tiene un artista, es un instrumento que está dentro de uno, pero a la vez, comunica palabra, sonidos. El Scates una buena opción para un jazzista, sobre todo, para un instrumentista de viento. Esta ocasión me sirvió además como oportunidad para consolidar y revisar la historia del  Scaten Cuba, en la cual Bobby, por supuesto, es protagonista.

En el coloquio, se habla sobre la influencia de Bobby, Zula, que es una de las artista del nuevo jazz que admiro mucho y tuve la oportunidadde ser parte de su desarrollo, hemos trabajado, junto con mi quinteto de jazz, que también hace música electrónica (jazztonic). Fue una experiencia muy bonita, estoy agradecido por ser parte de ese encuentro.

El jazz es una filosofía de vida

Me considero un músico, aunque el jazz cambió mi vida. El jazz es una forma de vida, de pensamiento, de proyección. Es una vertiente en la que vas profundizando, en la medida en que vas produciendo más música, y relacionándote con músicos importantes nacionales y extranjeros. Te das cuenta  de que el jazz es un género, en el que confluyen otros subgéneros, otros estilos.

El jazz trasciende lo que es la palabra. Hay muchos estilos musicales que tienen elementos del jazz, la timba, el danzón, entre otros. El jazz tiene que ver con la creatividad, la espontaneidad, con ir hacia las raíces propias. Nació en Estados Unidos, del canto de los negros algodoneros, del sufrimiento de la esclavitud en ese país, es por eso que el embrión de esa música está relacionado con ese sentido espiritual, de sufrimiento, de nacionalidad, de liberación.

Es parte de una filosofía de vida, donde el músico pretende liberarse y poner a prueba su creatividad, entonces, para todos los jazzistas es importante cultivar este género, desde el punto de vista, de mantener esa espontaneidad, esa osadía, sobreponerse, competir con uno mismo y crear nuevos lenguajes, nuevos patrones, fusionar, investigar más sobre la música, por ejemplo, como hace el maestro Alejando Falcón (reconocido pianista) con otros géneros dela música cubana.

En el caso mío, yo he mezclado con diversos géneros, con la música impresionista del francés, Claude Debussy, desde mi manera de ver, con la música folklórica cubana (Arará y Yoruba)  y con la música clásica, en esto de la cuestión virtuosa de ese género. Es decir, he desarrollado mis propios patrones, mis propios lenguajes a la hora de interpretar el jazz.

¿Jazz elitista?

Hay una gran parte del público que lo ve como elitista, algo intelectual,  ilegible, que no pueden comprender fácilmente, pero eso es en dependencia también, de la música que se proponga, del trabajo. El jazz tiene para repartir.