En la tarde de este miércoles 12 de septiembre fue presentado en el Piano-Bar Delirio Habanero de esta capital, la última producción fonográfica de Pancho Amat y su Cabildo del Son. El swing del son, perteneciente a la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales, Egrem, significa el regreso del maestro tresero y Premio Nacional de Música a esta disquera, después de varios años.

En el encuentro con la prensa se ponderó la calidad sonora de este disco que presenta la nueva imagen del Cabildo del Son, donde se respetan los patrones clásicos de la música tradicional cubana con un ritmo más fresco, sobre todo a la hora de improvisar. La placa la integran 12 temas y, a diferencia de las producciones anteriores del Cabildo, solo tres son de la autoría de Pancho, quien se dedicó a rescatar, arreglar y renovar temas de Rafael Hernández, Miguel Matamoros, Noel Nicola, Sindo Garay, Remberto Bécker, Reinaldo Hierrezuelo, Miguel Campanioni y Juan Formell, entre otros.

El propio Pancho significó el trabajo y composición de su grupo, al que se han incorporado algunos graduados de la enseñanza artística que redondean la nueva sonoridad junto a otros ya consagrados como Jorge Luis Reyes. El secreto está —dijo— en respetar estilos, pero con la novedad de cómo se toca cada tema en este disco, que hace un recorrido por la música cubana de oriente a occidente. Esta música apegada a la tradición —señaló— no tiene que gravitar solo en los estándares y clásicos tradicionales, aunque es propósito del álbum rescatar algunos de ellos y devolverlos al público de manera renovada, sin perder su esencia.  

Fiel a su concepto de “sonear la trova y trovar el son”, el maestro prefiere verse como “una polea de transmisión” que le lleve a los jóvenes la música cubana. El mayor logro para él es que se interesen no solo por oír cómo está eso, sino que se pregunten de dónde salió eso.  Por tanto, El swing del son constituye un  gran ajiaco entre el son y la canción trovadoresca como ingredientes fundamentales, donde se mezcla lo primigenio con lo actual, lo rural con lo citadino, lo oriental con lo occidental, lo “culto” con lo “popular” y lo foráneo con lo nacional.

La musicóloga Marta Bonet, presidenta del Instituto Cubano de la Música, saludó este nuevo disco de Pancho Amat y refirió que es un honor contar con su figura y su obra, que siguen dejando una impronta particular en la historia de la música cubana. Aprovechó el marco para invitar a todos el próximo 28 de septiembre a una gala en la Sala Avellaneda del Teatro Nacional que, como parte de Cubadisco 2018, homenajeará la figura de Ignacio Piñeiro, y que será dirigida artísticamente por Pancho. El tresero agregó que este será un homenaje único en que el público podrá disfrutar las diversas posibilidades de interpretación que provoca la obra de Piñeiro en la música cubana que se hace en la actualidad.

Por su parte, Mario Escalona, director general de la Egrem, señaló que es un orgullo para la disquera contar con la obra del maestro en el catálogo discográfico y editorial. Precisó que este es uno de los discos que ya tiene una presencia importante en las plataformas digitales de la música y con el que se ha negociado una gira internacional que ya tocó España como primer puerto, y que seguirá en el 2019 por otros países de Europa y Asia.

Para terminar, Pancho Amat y el Cabildo del Son deleitaron a los presentes con la interpretación de varios temas del fonograma, momento propicio para corroborar la gran maestría musical, entre chistes e improvisaciones alegres, de un compositor que da un nuevo aire al son cubano con ese swing que el Cabildo imprime a la música tradicional.