El músico cubano recién puso en circulación el compacto ADN, su más reciente producción musical, que ve la luz acuñado por la casa discográfica EGREM, y en el que “muestra músculo” una vez más asumiendo los roles de cantante, compositor, arreglista y productor.

Este sería el quinto álbum de su pródiga carrera musical,  el segundo que publica en solitario, y en el que reafirma, según comentó durante la presentación, el sonido que lo distingue dentro de amplio diapasón de la música popular bailable cubana.

ADN propone en sus 12 temas un recorrido por las diferentes vertientes que a lo largo del tiempo han nutrido a la música popular insular, y en los que se pueden reconocer las etapas formativas de Alain Pérez, muy influenciadas por el paso por importantes agrupaciones y una prolongada estancia fuera del país que no hizo más que concentrarlo en los ritmos nacionales como piedra angular de su trabajo.

Un elemento de la placa que abala los créditos del artista es sin dudas el trabajo autoral que brilla por la calidad de los textos y son el resultado del trabajo a ocho manos del propio Alain Pérez, su padre Gradelio, y los compositores Juan Antonio Gil y José Claro Fumero. Del este singular cuarteto nacieron títulos como de Flor en flor, Peligroso ladrón, Con corbata y sin cabeza, Shorcito, Lloraré, y el que da nombre al CD.

Lo otro que marca la nueva producción, entre las nominadas al Premio Cubadisco 2017 en la categoría Música Popular Bailable (maestros) es la lista de artistas invitados, en la que figuran cantantes e instrumentas, y que solo reafirman las intenciones del artista de proponer una material de calidad desde todos los puntos de vistas, con una sólida propuesta sonora, y de textos, y en materia de producción.   

Al llamado de Pérez respondieron el cantante panameño Rubén Blades y la diva cubana Omara Portuondo, el trompetista Guajiro Mirabal, el laudista Barbarito Torres, el grupo de rumba Osain del Monte, y El Micha, reconocido exponente de las sonoridades urbanas, quedando así conformada una nómina de lujo que guiada magistralmente por Alain.

La placa resume lo que es el artista, un exponente auténtico de las más raigales expresiones de la música popular cubana, en la que presentó credenciales con su entrega anterior Hablando con Juana, que circula en Cuba licenciado por BisMusic.

Hablando… y ADN muestran parte de lo mejor de la carrera de Alain Pérez, a quien muchos recordarán en la nómina de Irakere como bajista o sustituyendo en ocasiones en la guitarra (instrumento con el que se formó académicamente) al fallecido Carlos Emilio Morales. Tiempo después en la orquesta de Issac Delgado, donde además de instrumentista se destacó como compositor, arreglista y productor musical.

Luego los Van Van, y a finales de los años 90 parte hacia España, que marca un primer momento importante cuando en 2002 gana el Primer Pre­mio SGAE de Jazz Latino, a lo que siguió las colaboraciones con artistas de renombre internacional como por ejemplo Celia Cruz, los cantaores españoles Enrique Morente y Diego el Cigala, y por último en la banda del astro del flamenco Paco de Lucía, en la que militó a lo largo de una década y con la que se presentó en La Habana durante el V Festival Leo Brouwer de Música de Cámara en octubre del 2013.

En la discografía de Alain Pérez anterior a ADN y Hablando con Juana aparecen las placas Desafío (2001), En el aire (2006) y Apetecible (2010), materiales marcados por la calidad y genialidad de su autor.

Alain Pérez presentará ADN los días 18 y 25 de este mes en el teatro Mella y el Salón Rosado de La Tropical, respectivamente.