Con tan sugerente título, artistas aficionados y profesionales del barrio centro habanero de Cayo Hueso, realizan una excelente peña el penúltimo viernes de cada mes, en el Centro Cultural de los trabajadores cubanos, Palacio de los Torcedores, situado en San Miguel y Marqués Gonzalez.

Durante alrededor de dos horas, un colectivo integrado por Lázaro Alfonso Oviedo, Daisy Fonseca, Carlos Hierrezuelo y Glice Fariñas, esta última actriz profesional que funge como directora artística del colectivo, asumen la realización de un espectáculo que llena de alegrías y satisfacción a los numerosos asistentes, matizado por un ambiente de íntima comunicación con el público diverso que asiste, estableciéndose un desenfadado y útil intercambio que va, desde el disfrute de las actuaciones, hasta el abordaje de temas de conversación que resultan de utilidad para todos los presentes, incluidos sus conductores.

Es esta reciente sesión, junto a canciones, relatos y poemas de sus organizadores, la visita de un grupo de trabajadoras y trabajadores de la emisora Radio Progreso: directores de programas, guionistas, locutores y actores, quienes llevaron al auditorio sus experiencias, esfuerzos y satisfacciones, resultó de experiencia valiosa por su carácter instructivo y alegre a la vez.

Otro momento especial lo constituyó la actuación del grupo danzario de aficionados Osaín del Monte, con su baile tributo titulado Osaín, el orisha mayor.

Fueron también muy aplaudidas la actuación del cantante Ángel Luis y los diálogos con escritores, pintores y representantes de otras manifestaciones del arte y la literatura presentes, para hacer del encuentro una jornada de verdadero amor, ese que nace a puro corazón, que se hace precisamente para contribuir a la felicidad de los otros y al mejoramiento humano, cuando, como en este caso, no media ninguna remuneración material.

Con actividades como esta, el Centro Cultural Palacio de los Trabajadores, de la CTC, se convierte en importante centro promotor de la cultura comunitaria, cuyos principales beneficiarios son los pobladores del municipio Centro Habana, y en especial los del barrio de Cayo Hueso.