En horas de la mañana de hoy, la Casa de las Américas recibió la triste noticia del fallecimiento de Adelaida de Juan. Discípulxs, colegas, amigxs de diferentes generaciones han expresado su pésame por tan sensible pérdida para la cultura cubana. En particular, la Casa ha perdido, con su partida física, una trabajadora esencial, cuya inteligencia, sensibilidad y generosidad siempre contribuyeron al mejor desempeño de la institución.

Por casi siete décadas, compañera de vida, espíritu y cultura, del poeta y ensayista Roberto Fernández Retamar, presidente de la Casa, Adelaida fue y será una presencia constante entre nosotros. Sus aportes como crítica e investigadora del arte latinoamericano y caribeño, han fomentado la labor de la Casa en este campo. Su más reciente libro, Visto en la Casa de las Américas, publicado por el Fondo Editorial Casa, recoge su fidelidad profesional y compromiso ético con el ejercicio de la crítica y su testimonio como maestra e investigadora.

El próximo número de la revista Casa, el 290, publicará una reseña sobre este volumen a cargo de Silvia Llanes, directora de Artes Plásticas de la Casa y su exalumna. Cuando a Retamar se le impuso la Orden José Martí, por el Consejo de Estado, en ocasión de los cincuenta años de la Casa, mencionó muchas figuras de su pasado que habían marcado su relación con Martí y su formación intelectual. Entonces, hizo una pausa y se dirigió a Adelaida que estaba sentada frente a él: "Dije que iba a hacer una excepción en relación con estos amigos muertos que evoco, y que voy a evocar a una persona viva. Es Adelaida de Juan, a quien encontré al principio de mis estudios universitarios, y con quien me vinculé para siempre. Ahora tenemos cincuenta y siete años de casados."

El 15 de agosto cumplirían 66 años de casados.