Este jueves, en el Salón de Mayo del Pabellón Cuba, sede de la Asociación Hermanos Saíz (AHS), fue presentado el libro Debatir en Revolución. Otras formas de hacer, otros modos de ser del joven ensayista, profesor y coordinador de la célula de la organización que agrupa a los jóvenes escritores y artistas en la Universidad de las Artes, Yosvany Montano Garrido.

La presentación estuvo a cargo del ministro de Cultura Abel Prieto Jiménez y del historiador Ernesto Limia, este último prologuista del texto publicado por la Editora Latinoamericana Ocean Sur en colaboración con la AHS. Se trata de un compendio de artículos que su autor ha venido publicando en distintos medios, sobre todo digitales, como La Jiribilla o Cubadebate, y que aborda temáticas esenciales de la cultura cubana.

Limia señaló que este es un libro que propone revolucionar las maneras de hacer desde la perspectiva joven de la inconformidad, donde se conjugan la sensibilidad humana con una profunda visión política, y que demuestra una vez más que la madurez no está en la edad, sino en el conocimiento, los sentimientos y el diálogo. Desde la perspectiva y el compromiso de pensar el país, Debatir en Revolución propone romper las barreras generacionales y formula propuestas desde los nuevos códigos de comunicación con que los jóvenes asumen el reto de perfeccionar el socialismo en la Cuba de hoy.

Abel Prieto resaltó la importancia de que esté escrito por un joven comprometido con el desafío de la cultura, la educación y la ideología, que entra de lleno —a través de sus ensayos— en los debates más urgentes del país. Como hijo consciente de su época, Yosvany piensa en serio y reflexiona con rigor en un texto que se erige en homenaje a Marx, al Che y a ese intelectual marxista y guevariano, tan cercano a la juventud, que fue Fernando Martínez Heredia.

Lucidez y valentía intelectual —destacó Abel— resuman los ensayos “Pedagogía de la verdad” y “El exilio de las humanidades” donde el autor trae a colación y reelabora ideas de otros destacados intelectuales cubanos como Graciella Pogolotti, y donde alerta sobre el peligro de ser contaminados por esos procesos pragmáticos y neocoloniales que el neoliberalismo ha impuesto en las universidades del mundo, convertidas en fábricas de especialistas para las corporaciones. La visión del estudiante como producto y la simplificación de las carreras humanísticas son problemáticas abordadas que avizoran la necesidad de que la educación cubana no caiga en la trampa globalizadora, porque los retrocesos éticos y educativos pueden poner en peligro a la Revolución. La Cuba de hoy contradictoria, esperanzadora, compleja, necesita ensayistas como este que la sueñen, que la piensen y que la defiendan de la oleada reaccionaria global.

Por su parte, el autor agradeció el empeño de Ocean Sur y de la AHS en publicar este texto que —según sus palabras— constituye un lenguaje cifrado avivado por los debates en el aula, interpelado por sus alumnos, y por otros que constituyen preocupaciones en círculos más cerrados de amigos. Este es un proyecto que significa el atrevimiento de escribir —dijo— y que aun se está gestando. Ojalá se convierta en un trabajo útil para mover ideas, provocar reflexiones y para que otros emprendan el camino de ensayar la realidad.