La crítica especializada valora a PIB 2018 como una articulación de principios ideológicos a través del desarrollo dramático. Precisamente, drama, suspenso y reflexión sobre la banalidad de elementos contemporáneos son las características fundamentales de esta obra del grupo El Ciervo Encantado, bajo la dirección de Nelda Castillo.

La calidad de la puesta en escena, el mensaje que trasmite y las excelentes cualidades histriónicas de Yindra Regüeifero, permitieron que este perfomance inaugurara la 18 edición del Festival de Teatro de La Habana. El telón subió y a partir de ahora será el público quien dará la última palabra.

Para la joven actriz, de tan solo 22 años, este ha sido el papel más difícil que le ha tocado interpretar. Son muchísimas horas de entrenamiento y la trama y el personaje exige un esfuerzo psicofísico muy elevado. De hecho, fueron dos los que iniciaron el proyecto y solo Yindra logró resistir.

PIB 2018 parte de las inquietudes sobre las más recientes producciones del reguetón cubano: investiga el abandono, la destrucción, la contaminación, la incomunicación y el lenguaje abusivo de las letras. Después, esa investigación fue llevada a las tablas, con improvisaciones, con la visión de la realidad que vivían, que finalmente se concretó en un guion bien pensado y de excelente factura.

El “ser” que da vida Yindra grita, se lamenta, declama en jerigonzas letras sucias, insignificantes, subproductos del alimentario mental- cultural, del desamor, la ira, el egoísmo, el consumismo y la apatía. El reguetón, el producto interno, sobre todo bruto, se compara con la basura, con los desechos, con la toxicidad. 

El personaje no necesita de una gran escenografía, ni montaje; basta ella, con sus excelentes cualidades histriónicas y su dominio de las tablas, para trasmitir ira, despecho, desenfado y en instantes hasta miedo. El vestuario es minimalista, casi nulo, complementado con el maquillaje que logra transformar a Regüeifero en un ser despreciable, en la basura, en la contaminación.

PIB 2018 hace reflexionar, vas más allá de la superficialidad y se centra en problemas reales y palpables. Ese es una de las principales ventajas del teatro, influye, transforma, modifica.

PIB 2018 tuvo una función única en este festival, pero la oportunidad no está perdida, volverá a su sede en el Ciervo. Por ahora queda la opción de disfrutar de más teatro, porque La Habana está en Festival