El 21 de marzo es un día de mucha significación y sentimientos en todas direcciones. Al menos, nueve conmemoraciones y celebraciones con carácter universal suelen suceder en esa jornada:

• Equinoccio de primavera en el hemisferio norte, y de otoño en el hemisferio sur.
• Día de las flores amarillas, en México, desde 2005.
• Natalicio en 1806, en Oaxaca, México, de Benito Juárez García, indígena zapoteco, primer presidente indígena de los Estados nacionales modernos americanos y Benemérito de las Américas. Aniversario 229.
• Día Internacional del Novruz, fiesta de inicio del año lunar en la civilización ancestral persa. Establecido por la Unesco en 2010.
• Día Mundial de la Poesía. Establecido por la Unesco en 2011.
• Día Mundial del Síndrome de Down. Establecido por la ONU desde 2006.
• Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo. Establecido en 2002 por la Unesco.
• Día Mundial para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Racial. Establecida por la ONU en 1966 en conmemoración de la represión policial en la ciudad sudafricana de Shaperville, en 1960, de una manifestación anti-apartheid en la que fallecieron 69 personas.
• El 21 de marzo de 1991 fue proclamada la independencia de Namibia por su líder histórico Sam Nujoma, cuando se pudo dar cumplimiento a la Resolución 435/1978 de la Asamblea General de Naciones Unidas tras la victoria conjunta de las tropas cubanas, angolanas y namibianas frente al ejército del racista sudafricano.

Se conocen al menos diez formas de discriminación: racial, sexual, por identidad de género,  por orientación y/o preferencia sexual, por discapacidad, por hábitat en zonas rurales, por condicionantes económicas y sociales, por pobreza (aporofobia), por estructura socioclasista, por padecimiento de enfermedades, por religión...

Hay varias clasificaciones de discriminación racial, la más común define cinco formas:

Racismo biológico o discriminación por el color de la piel.

• Racismo etnocentrista o discriminación por pertenencia a una etnia, grupo o subgrupo étnico u origen étnico o nacional.
• Racismo antropocéntrico o discriminación de personas que, aunque tienen una apariencia epitelial del color hegemónico son mestizaje genéticas porque tienen ascendientes de otros colores de piel.
• Racismo simbólico o discriminación en el orden psicológico en forma de prejuicios sutiles o encubiertos y que opera voluntaria o involuntariamente
• Xenofobia o racismo contra el inmigrante.

Estas cinco formas se presentan de dos maneras: racismo hegemónico y racismo reactivo. El primero, se ejerce desde el poder político, económico y social y el segundo, como reacción del inferiorizado contra el dominante.

Cuba es un país genéticamente mestizo, fenotípicamente diverso y étnicamente un etnos-nación y un solo pueblo.

A una raza, conceptualmente, pertenece un grupo de individuos dentro de una especie con similares “cualidades y capacidades” que se diferencia de otros grupos de la misma especie.

La diferenciación fenotípica, genotípica y étnica de los grupos humanos no nos hace racialmente diferentes. Somos una sola raza en nuestra especie.

La defensa del “Color cubano” de Guillén y del “Ajiaco” de Fernando Ortiz es la defensa de una patria unida y desracializada, de una sola nación, de un solo pueblo y una sola cultura: la cubanía, la cubanidad, lo cubano...